LA VIVIENDA EMIRAL
Entre
la segunda mitad del siglo VIII y el siglo IX d.C. se construyó un conjunto de
viviendas que se fueron adosando a la cara interior de la muralla que perimetra
la zona amesetada del yacimiento.
Las
serranías del entorno, especialmente la sierra de la Muela, serían las
principales canteras de aprovisionamiento de materiales pétreos para la
construcción del poblado. Ello se puede percibir en el tipo de roca empleado
para los muros tanto de viviendas como de fortificaciones, así como la matriz
arcillosa de color amarillento existente tanto al pie del cerro como de la
Muela, muy útil para los tapiales y los revoques de las paredes y muros.
A
la hora de construir una vivienda, se empezaba por erigir un zócalo de
mampostería de piedra trabada con tierra de unos 80 cm de altura. Sobre esta
base, se levantaba una pared de casi dos metros de altura con tapia de tierra.
Con respecto a los suelos, en general estaban hechos simplemente con tierra apisonada,
aunque también hay algunos ejemplos donde se ha documentado pavimentos de lajas
de piedra o de mortero de cal.
Con
respecto a las techumbres, se erigían a partir de materiales vegetales
recolectados de las inmediaciones, especialmente arbustos y gramíneas, que se
apoyaban sobre vigas de madera de pino como soporte. Posteriormente, se
aplicaba una capa superior de tierras margosas procedentes de la Muela para
impermeabilizar el techo y proteger el interior de las inclemencias
meteorológicas.
Las
plantas de las viviendas parecen ajustarse a un modelo de espacios
rectangulares o cuadrados. Estos espacios podían funcionar como unidades de una
sola habitación (monocelular) o como áreas que se organizaban alrededor de un
espacio abierto, a modo de patio incipiente, que se desarrollará plenamente en
los siglos siguientes.
Tal
y como se puede apreciar, el asentamiento de Las Paleras estaba erigido sobre
materiales pobres fácilmente susceptibles a la propagación de incendios como el
que precisamente devastó toda la zona a mediados del siglo IX. Por esta razón,
aparece un delatador nivel estratigráfico constituido por cenizas prácticamente
por todo el área urbana.